Diario del ratón Federico.

14/1/2020

Querido diario:

Hoy estuve paseando por las alcantarillas con mi amiga Eustaquia, nos encanta pasear por ahí. Luego de eso, nos colamos en un restaurante sin que los humanos nos vieran, estuvimos robando restos de comida que sobraban.

Ahora acabamos de llegar a casa y yo me puse a hacer la cena con la comida que robamos del restaurante. Encontrar comida siendo un ratón a veces no es fácil y hay que aprovechar para coger comida (o robarla) si hay la oportunidad.

Cuando entramos a robar, cogimos un cacho de pollo y mucho pan así que eso será la cena de hoy, y creo que también la de mañana ya que robamos mucha comida y nos dará para varios días. Ahora mismo estoy a punto de empezar a cenar y creo que ya dejaré de escribir por hoy, ya conté lo que hice todo este día.

Buenas noches.

Federico.

15/1/2020

Querido diario:

Hoy es un nuevo día, Eustaquia y yo hemos quedado para salir a por comida. Eustaquia me dijo si íbamos una hora antes ya que así podríamos robar más comida y yo acepté. Cuando fuimos, el restaurante estaba cerrado y no pudimos ir a por la comida.

Media hora después encontramos otro restaurante que sí estaba abierto y nos colamos dentro de él. Ese restaurante era de comida china. Nunca habíamos probado ese tipo de comida y no sabíamos si nos iba a gustar. No obstante, decidimos probar. Cogimos la comida que pudimos y echamos a correr.

De camino a casa, pasó un coche y casi nos atropella a Eustaquia y a mí. ¡Menudo susto nos llevamos! Pero conseguimos llegar vivos a casa.

18/1/2020

Querido diario:

Esta mañana me levanté con muchas ganas de ir a caminar. Me bañé y me vestí para salir a la calle. La ciudad en la que vivo es muy grande, hay muchas alcantarillas. Salí de casa y me metí por una de las alcantarillas. Caminé durante una hora, y por el camino me encontré a una ratita. Se llamaba Tiffany y estaba muy asustada. No hablaba mi idioma, y decidí coger mi móvil y usar el traductor para entenderme con ella. Al final, después de muchos intentos, conseguí comprender lo que me quería decir. Resulta que estaba perdida y no sabía volver a casa, ya que era nueva en la ciudad. La acompañé a su casa y luego fui a hacer la cena a casa.

Este fue mi día de hoy: hice una nueva amiga.

Federico

Nelly 1º ESO B